El MIC va a evaluar al país no para ver cómo estamos internamente sino para cumplir lo que dicta un reglamento extranjero.
ASUNCION, 22-04-2024 (Chaco 4.0) – “El decreto 1541 de 2024 es el primer paso legal para el establecimiento del Reglamento 1115/23 de la Unión Europea dentro del funcionamiento gubernamental paraguayo”. Esta es una puntualización que el establishment gubernamental debiera revisar antes de seguir adelante en la misión autoimpuesta de ciertos sectores estatales de alinearse a las exigencias de la Unión. El ingeniero agrónomo Alfredo Molinas, asesor especialista en temas agroambientales, exministro del Ambiente y también de la cartera de Agricultura y Ganadería, agrega en su análisis que los representantes del sector productivo fueron tomados de sorpresa ya que durante la reunión oficial mantenida con el Presidente de la República nada les comentó sobre este paso burocrático de enorme alcance.
En un considerando -señala el experto- el decreto presidencial afirma que “las reuniones mantenidas justifican la necesidad de organizar y coordinar los esfuerzos del Poder Ejecutivo, incluyendo sus ministerios y los demás organismos y entidades del Estado, en torno a la evaluación de los nuevos estándares internacionales y la implementación de medidas en todo el ámbito nacional”.
Molinas remarca el desconcierto generado con el decreto 1541: “Por la confianza que desde el sector privado tenemos en él ( el presidente Peña) y por su apoyo al campo, no terminamos de comprender cuál es el mensaje que desea enviar a los representantes de los gremios organizados del país sin haber compartido antes el contenido del decreto que comentamos”.
DICTADOS FORÁNEOS – Molinas agrega que el Ministerio de Industria y Comercio, puesto al frente de este operativo, va a evaluar el país pero no para ver cómo estamos internamente sino para cumplir lo que dicta un reglamento extranjero.
Y asevera luego: “Construir indicadores socioambientales a pedido de la Unión Europea es una entrega de soberanía nacional al menos desde el punto de vista técnico”.
El dictamen técnico de Molinas es contundente. Afirma que aplicar tal decreto significa ceder ante los mandantes europeos sin importar nuestras circunstancias biogeográficas, ecosistémicas y sociales además de incorporar sus definiciones técnicas, sus mapas, sus indicadores, su significado del cambio de uso de suelo sus condiciones de cómo labrar la tierra sus exigencias de cuáles agroquímicos utilizar que deben comer las vacas Dónde y cómo se puede producir.
PURAS IMPOSICIONES – Molinas asegura que la cuestión Hubiera sido diferente de haber existido un acuerdo entre la Unión Europea y el gobierno del Paraguay refrendado por el congreso, que asegurará que los documentos y certificados expedidos desde los estamentos gubernales paraguayos fueran explícitamente reconocidos por el reglamento 11 15 23 de la Unión Europea.
“Pero hasta hoy -afirma categóricamente el ingeniero agrónomo molinos- la Unión Europea se ha cansado de repetir que ninguna certificación que provenga de estamentos gubernamentales paraguayos será reconocida y por lo tanto no hay garantía de que lo que promueva y se implemente tenga una validez internacional”.
¿EN QUÉ QUEDAMOS? – En el tramo final de su exposición, el ingeniero Molinas dice que si las mismas autoridades afirman que la producción es el motor de la economía del país y los productores son Los mecánicos de este desarrollo cada vez más sostenido, sostenible y sustentable nos preguntamos entonces porqué siguen escuchando más a las organizaciones no gubernamentales, a la cooperación, a los donantes «desinteresados», etcétera pasando a segundo plano a los artífices del desarrollo y prefiriendo a activistas que el único brote que habrán visto en su vida es el de algún poroto germinando en la clase práctica de botánica en el aula escolar.