Canciller Scholz: “La UE debe dejar atrás su visión eurocéntrica y buscar un trato de igual a igual con América Latina”.
Si, más allá de la guerra de Ucrania y en el primer año y medio de mandato del canciller Olaf Scholz, se ha visto algo parecido a una agenda de política exterior y es el intento de encontrar nuevos socios más allá de Europa.
La UE debe dejar atrás la visión eurocéntrica de las últimas décadas y luchar por una asociación con los países de África, Asia y América Latina que no sólo afirme, sino que establezca el trato de igual a igual, advirtió Scholz a principios de mes en el Parlamento Europeo.
El canciller se pronunció enérgicamente a favor del acuerdo de libre comercio con los países sudamericanos del Mercosur, y «en perspectiva con muchos otros países».
Sin embargo, el pensamiento eurocéntrico también está anclado en su coalición, especialmente allí donde el eurocentrismo suele ser más criticado: en el ala izquierda de Los Verdes.

PRINCIPAL ESCOLLO — El Partido Ecologista tiene problemas con el acuerdo comercial con los países del Mercosur porque no cree que las normas para la protección de la selva tropical tengan suficiente alcance. La oferta de abrir el mercado se quiere utilizar ahora como instrumento de poder con el que interferir en los asuntos internos de los Estados amazónicos. Detrás de las supuestas buenas intenciones está la opinión de que los europeos están en mejor posición para juzgar lo que es bueno para América Latina que los gobiernos democráticamente elegidos allí. Eso no es un trato de igual a igual. O, como se quejan funcionarios de la UE a puerta cerrada: imperialismo de valores.
Precisamente los taladores de bosques europeos quieren explicar a los brasileños cómo debe funcionar la protección de los bosques, así que no es de extrañar que a los europeos les resulte difícil establecer asociaciones internacionales.
Por supuesto, la protección de la Amazonia como espacio natural intacto y depósito de enormes cantidades de CO2 tiene una enorme importancia mundial. Si muere la selva tropical, muere la esperanza de proteger el clima y conservar las especies. Por eso el acuerdo de Mercosur contiene un capítulo sobre sostenibilidad.
FIN DE PROTECTORADOS — Pero los Verdes quieren más. Insisten en objetivos concretos de protección forestal y exigen que su incumplimiento pueda ser sancionado.
Este intento fracasará. Los tiempos en que las democracias occidentales determinaban las reglas de la economía mundial han terminado. El poder económico de los países BRICS, que además de Brasil incluyen a Rusia, India, China y Sudáfrica, supera ya al de los países del G7. En este nuevo mundo, Europa debe aprender a ser humilde.
Si la UE espanta a los latinoamericanos, éstos se volverán aún más hacia los chinos.
Los europeos se habrían perjudicado económica y geopolíticamente sin proteger ni una hectárea de selva tropical.