Debido a la expansión del maíz, la próxima temporada triguera no dispondría de superficie suficiente para ampliar los cultivos.
ASUNCION, 25-03-2022 (Chaco 4.0) — El ultimo informe agrometeorológico del Instituto de Biotecnología Agrícola (INBIO) indica que los cultivos de maiz zafriña dispondrán de humedad suficiente para alcanzar un buen grado de desarrollo.
De acuerdo a lo observado -dice el informe- las condiciones de disponibilidad de agua en las unidades de suelos de los departamentos monitoreados, presentan estados que se ubican entre déficit leve (70-90%) y excesos hidricos. Según el último informe disponible, la mayoría de los suelos presentan estados adecuados de humedad en relación a las necesidades hídricas del cultivo. Estas condiciones estarían asociadas importante registro de lluvias de los últimos días.
En la Región Oriental, los departamentos de Canindeyú, Alto Paraná y Caaguazú han dado un vuelco drástico en cuanto a la reserva de agua util para la agricultura con respecto a meses anteriores en que la sequía los ha castigado severamente, al igual que casi toda la región.
En la Región Occidental, las precipitaciones han alcanzado niveles más que satisfactorios y muchos cultivos presentan una etapa de desarrollo optimo, haciendo presumir buenos rindes para la próxima cosecha de maiz y de soja.
TRIGO EN PROBLEMAS — Entre la primera y segunda quincena de mayo comenzará la siembra de trigo en la región Oriental. La amplia superficie cubierta actualmente por los cultivos de maiz zafriña en los departamentos de Canindeyú, Alto Paraná y Caaguazú podría impedir un aumento de la superficie cultivada de trigo y aprovechar así la alta cotización del cereal en los mercados internacionales. Se hace dificil que la cosecha del maíz termine a tiempo para encajar con la ventana de siembra de trigo.
Referentes del sector informaron también que al presente se registra cierta escasez de semillas de trigo, gran parte debido a que muchos cultivares y productoras de semillas sufrieron graves pérdidas a raíz de la sequía que azotó casi todo el país. Con 370.000 hectáreas cultivadas el año pasado, el cereal tuvo la peor temporada en más de una década, muy lejos de coberturas como la de 2014, con 635.000 hectáreas, un rendimiento de 2.400 kilos por hectárea y una producción de 1.514.000 toneladas.
Este año, además de lo que pueda sembrarse en la región Oriental, el trigo se refugiaría en el Chaco, especialmente en fincas de la zona de Mariscal Estigarribia en donde se probarán variedades con muy buen desempeño en condiciones extremas de humedad y aprovechando que en esa región los cultivos prácticamente no necesitan abono dadas las condiciones de un suelo naturalmente rico en fósforo y nitrógeno.