Inigualable jinete, Felipe Figueredo lucía su estampa de hombre de a caballo en la Fiesta de la Tradición Misionera.
ASUNCION, 12-12-2020 (Chaco 4.0) — “Hay que aclarar que nadie puede hacer todo este trabajo solo, sino en conjunción de conocimientos y esfuerzos. Por ello, agradezco también la confianza depositada en mi persona por la ARP, para que todo esto funcione y salgan a la luz los buenos resultados cosechados” (ARP Web).
Esto expresaba hace algo más de dos años el Dr. Felipe Figueredo, médico veterinario, quien falleció a los 75 años, dejando una dilatada carrera profesional en pro del desarrollo de la actividad ganadera en general y lechera en particular.
Sería difícil enfocar alguno de los tramos de la cadena de valor de la leche sin encontrar la mano del Dr. Figueredo. Fue un vigoroso impulsor de la consolidación de un renglón de la ganadería que por mucho tiempo estuvo estancado hasta que un profesional de la talla del Dr. Figueredo le puso energía, conocimiento y perseverancia para el logro de un objetivo central: hacer de la producción lechera uno de los principales renglones de la economía nacional
IMPULSO A LA CADENA – Por muchos años, el Dr. Figueredo se dedicó a impulsar la producción lechera con introducción de genética de avanzada, manejo apropiado de planteles, el delicado capitulo sanitario y la adopción de procesos de industrialización que tuvo su máxima expresión en Agroindustrial Guarapí, para Doña Angela, un verdadero icono de la industria láctea nacional. Este centro industrial tiene ya 37 años de tradición y se inició con Federico Figueredo, padre de Felipe Figueredo, de donde se deduce la firme tradición familiar en la reafirmación de la compleja cadena de valor de la leche.
Para tener una idea de la impronta que deja el Dr. Figueredo en esta actividad basta decir que diez años atrás, el consumo per capita de leche en el Paraguay era de unos 85 litros anuales mientras que en 2019 superaba los 140 litros. Aún falta un importante tramo para llegar a los 180 litros anuales recomendados por la FAO, pero sin duda la producción e industrialización de leche sigue firmemente en esa dirección.
ALMA DE DOCENTE – En los últimos diez años, el Dr. Figueredo se había concentrado en su faceta de dirigente gremial, como presidente de la Asociación de Productores de Leche, y también en su vocación de docente y asesor, especialmente de la Comisión Técnica de la ARP que llegó a presidir. Figueredo consideraba que “una de las formas de transmitir conocimiento pecuario es a través de congresos, conferencias, charlas y cursos sobre actividades pecuarias, y que uno de los desafíos más importantes de la Comisión Técnica es el aumento sostenido de la tasa de procreo, y juntamente con el Instituto Paraguayo de Tecnología Agropecuaria (IPTA), incentivar la investigación” (ARP Web).
Innumerables cooperativas, comités de productores, colonias menonitas y comunidades indígenas tuvieron la invalorable experiencia de contar con la transmisión de conocimientos técnicos del Dr. Figueredo.
Su fallecimiento deja un enorme vacío no sólo a la comunidad ganadera sino también una pérdida insustituible al mundo de la docencia y la transmisión de conocimiento.
Lo lloran también los cultores de la Fiesta de la Tradición Misionera, celebración que tenía en Felipe Figueredo la mejor estampa del hombre de a caballo, la forma como iniciaba cada jornada recorriendo su establecimiento.
Así lo conocieron sus colaboradores. Y así habrán de recordarlo.