Son los mismos que en enero pasado usaron bombas molotov y atacaron a la policía. La inacción de las autoridades colma la paciencia de los productores.
Los productores de Colonia 3 de Noviembre se preguntan qué tienen que hacer para que las autoridades policiales y judiciales terminen con los actos de amenaza, invasión y destrucción de costoso equipo agricola que sufren constantemente, ahora en plena producción aprovechando la buena ventana climática.
Este jueves 27, trabajadores que ingresaron a sus parcelas con tractores y equipos de fumigación tuvieron que detenerse casi de inmediato. Una de las máquinas tropezó con una enorme varilla de hierro clavada en la tierra a modo de «clavo miguelito», en realidad «miguelote» afirmaban dado el tamaño de la pieza de hierro que se incrustó en una de las cubiertas de un tractor. Las tareas no pudieron ser reanudadas hasta luego de inspeccionar minuciosamente el terreno, en la búsqueda de más trampas.
«Esto es puro terrorismo» expresaba el presidente de la UGP, ingeniero Hector Cristaldo a los periodistas, agregando que este es el mejor momento para avanzar en las tareas agrícolas, con buena humedad en el suelo y tiempo estable.
Cada hora de paro significa pérdidas para los productores, dado lo estrictos que son los tiempos en el calendario agrícola.
Cada cubierta de la maquinaria agrícola empleada en 3 de Noviembre tiene un costo de entre 3 y 4 millones de guaraníes.
Los merodeadores siguen acampados en las inmediaciones de la colonia ante la vista y paciencia de los productores y la escasa efectividad del personal policial y la fiscalía local.