Alegando una confusa «verificación», David Gonzalez, intendente de Capiibary, ingresó sin permiso a la estancia Panambí ubicada en el distrito.
El municipe no pudo explicar cómo entró a la estancia, en compañía de un grupo de personas. En determinado momento fue encarado por el encargado del establecimiento, Alfeu Fritzen, quien increpó a González por haber ingresado sin permiso a una propiedad privada preguntándole además qué estaban haciendo allí. El Intendente alegó estar buscando «un punto» según el cual se podría probar la superposición de títulos de propiedad. El funcionario señalaba en todo momento una carpeta con supuestos documentos que, sin embargo, se negó a mostrar al encargado de la estancia. Los dos videos, tomados por Fritzen, relatan pormenorizadamente el suceso.
Observación del Editor: El Intendente de Capiibary debería saber que su acción fue ilegal, un atropello a la propiedad privada y una acción particular carente por completo de valor probatorio en causa alguna. Los conflictos de intereses que interpelen la legitimidad de una propiedad se dirimen en los tribunales. Y es el organo jurisdiccional -el juzgado en el cual se haya abierto la causa- el que dictamina los pasos legales a seguir. Para ser intendente, el susodicho muestra una supina ignorancia del orden jurídico o, peor aún, se burla en forma sangrienta de él.
