Lapidario pronunciamiento de la Federación de Cámaras Binacionales de Comercio contra la reforma impositiva. Instan a mejorar el gasto público.
La FEDECAPY emitió un documento en el cual considera que el denominado “proyecto de modernización y simplificación del sistema tributario” solo contribuiría a “aumentar impuestos, eliminando y limitando deducciones y además ampliando la territorialidad del impuesto a la renta, alcanzando ciertas rentas generadas en el exterior”.
Luego, la federación expresa que a diario la prensa informa “cómo se malgastan los fondos públicos en salarios superiores a los pagados en el sector privado, viáticos por viajes sin sentido, gastos médicos descomunales, etc.”
La verdadera reforma
Más adelante y en forma categórica, la federación afirma:
“Creemos firmemente que la verdadera reforma que necesita el país es la reforma del gasto público y no el aumento de los impuestos. Recaudar más para gastar igual no solucionará los problemas de inequidad y pobreza”.
También afirma que “el aumento de la recaudación que se logre se perderá automáticamente si no se cambia drásticamente el objeto del gasto público. Con la misma legislación, pero con mayor control de la recaudación y gastando eficientemente, se conseguirán mejores resultados”.
En otro punto de su pronunciamiento, las once entidades advierten que “como cámaras binacionales somos testigos y protagonistas de un incipiente proceso de industrialización que se está dando en nuestro país, con la venida de inversores extranjeros motivados “casi exclusivamente por la baja presión tributaria”. La historia nos demuestra que los países pequeños crecen poniendo su mirada en el mundo y promoviendo la inversión extranjera, como es el caso de Corea, Singapur, entre otros”.
Mirar al mundo
Las cámaras binacionales agremiadas dicen estar convencidas de que “debemos parar de mirarnos el ombligo, levantar la cabeza y mirar al mundo como una oportunidad y no como una amenaza y, dentro de esta lógica, la gran oportunidad histórica del Paraguay pasa por ser parte de las cadenas industriales regionales y convertirse en un país exportador de productos manufacturados. Esto generaría miles de puestos de trabajo y bienestar para nuestra gente”.
Y luego hacen esta reflexión:
“El mejor programa social es la generación de empleos y estamos abocados a ello. Pero este proceso de crecimiento podría verse abortado por una reforma tributaria que solo traerá desaliento a la inversión nacional y extranjera, así como un aumento de la informalidad”.
Finaliza con la siguiente exhortación:
“Alentamos fuertemente a todas las autoridades involucradas en este proceso, a pensar a largo plazo, en el Paraguay que queremos para nuestros hijos, en poner mano firme en la lucha contra el corrupción, el contrabando y la evasión, y en realizar los cambios profundos que dejen huellas permanentes”.
FIRMAN