A Manuel Fariña, productor de Yhú, le quemaron la sembradora, le arrasaron el campo pero con valor y la solidaridad de sus vecinos, logró reponerse y cosechar su soja.
Con datos, fotos y videos de UGP-CAP
El episodio se remonta a octubre del año pasado. Manuel Fariña y sus hijos Manuel, Miguel y Raúl, estaban en plena etapa de siembra en su parcela de 18 hectáreas en el distrito de Yhú, departamento de San Pedro.
Fariña alquila esas tierras y estaba sembrando soja cuando un grupo de desconocidos, armados con escopetas y machetes, los capturaron, les robaron todo lo que llevaban y luego de echarlos de la parcela, incendiaron la costosa sembradora recién comprada.
Para Fariña y su familia, aquello pareció ser el final.
Como el Ave Fénix
Pero la historia no terminaría allí. Conocido el episodio, vecinos de Fariña decidieron solidarizarse con la familia y echarle una mano.
Después de instarlo a no desfallecer, a no entregarse, le pusieron a su disposición una sembradora reacondicionada con la cual Fariña pudo volver al campo y terminar lo que había empezado: sembrar la soja tal como lo habían planeado él y sus hijos.
Fariña no termina de agradecer aquel gesto y prometió devolver el costo de la máquina con lo que pueda obtener de la soja cosechada.
Y para un productor, no hay mejor música que la de una trilladora levantando la cosecha:
La historia del Ave Fenix, que resurgió de sus cenizas, se repite una vez más. Sólo que esta vez no fue una leyenda sino una realidad hecha de valor, perseverancia y amor al trabajo.
